En nuestro Post de esta semana os hablamos de como tratar las pieles acnéicas en la edad adulta, el acné adulto es diferente al juvenil, tiene unas características propias y debe tratarse adecuadamente. La piel del adulto y muy particularmente la de las mujeres, es más sensible y tiene más predisposición a las cicatrices y manchas, las imperfecciones son más resistentes y tienen un mayor riesgo de convertirse en crónicas.
El acné es una patología de un órgano de la piel, el folículo pilosebáceo. En el acné existen una serie de alteraciones que determinan la producción de la enfermedad: el aumento de producción de sebo o grasa, el taponamiento u obstrucción del canal folicular (el orificio o canal por donde sale el pelo hacia el exterior de la piel), la infección por bacterias y la inflamación.
Muchas de los casos de acné adulto son pacientes con una tendencia a la piel grasa, que incluso pueden no haber presentado un acné en la adolescencia y que, a partir de los 25-30 años, desarrollan granos y bultos más inflamados, que aparecen bajo la piel, duran semanas, y curan dejando marcas o cicatrices.
Debemos acudir a a profesionales para una valoración en profundidad del tipo de acné que nos recomiende el tratamiento más apropiado para nuestro caso. Una vez indicado el tratamiento, siempre como norma seguiremos unos pasos que son imprescindibles si queremos erradicar el problema.
- Limpieza profunda, diariamente y con productos específicos que no resequen la piel. *Rutina de limpieza mañana/noche.
- La constancia es una gran aliada.
- Evitar manipular los lesiones y evitar remedios caseros.
- Evitar el uso de cremas y maquillajes comedogénicos, grasos.